Alumbrado Urbano Inteligente

Alumbrado urbano Inteligente en una Smart City

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Dentro de las Smart Cities, encontramos diferentes verticales. Y dentro de las verticales hay aplicaciones o casos de uso. Pues uno de ellos es el alumbrado. Éste no solo cobra gran importancia debido a la necesidad lumínica que cubre en las ciudades, sino que también supone una gran inversión del dinero público. Tan sólo en fechas especiales como la Navidad, las ciudades españolas tienen un gasto promedio de unos 250 mil euros, llegando algunas incluso a superar los tres millones de euros. Es por ello que es importante encontrar la manera de gestionar el sector lumínico de la manera más eficiente posible. ¿Te quedas más para descubrir qué es el Alumbrado urbano Inteligente?.

¿Qué es el Alumbrado Inteligente?.

El Alumbrado Inteligente o Smart Lighting es una de las ramas menos conocidas del IoT, a pesar de los grandes beneficios que su implementación proporciona a las ciudades. Se trata de conseguir la eficiencia energética y el ahorro económico en las ciudades centrándonos en el sistema de iluminación. No sólo aporta beneficios en estos dos campos, sino que también contribuye al desarrollo sostenible, la mejora de calidad en la vida ciudadana, la agilización y automatización de procesos, o la disminución del exceso de luz artificial en los núcleos urbanos.

Según la empresa de análisis Navigant Research, los ingresos por alumbrado urbano en 2027 llegarán a superar los 7 millones de euros. Por otra parte, definen el término de alumbrado inteligente, como “el uso de tecnologías avanzadas dirigidas al funcionamiento, la supervisión y la gestión eficientes del alumbrado urbano dentro de una estrategia de ciudad inteligente”.

Para que este tipo de sistemas de iluminación puedan ser desarrollados y digitalizados, son necesarios una red de sensores, nodos, cámaras, comunicaciones inalámbricas y análisis de datos.

Bombillas inteligentes: luces LED.

Las bombillas, son claramente una parte esencial del alumbrado. Las bombillas inteligentes, no son otra cosa que luces LED con conectividad WiFi (con protocolos de conexión como Zigbee o Z-Wave).

La utilidad de estas no es simplemente la de poder controlarlas desde la distancia. Se puede ir mucho más allá integrándolas con tecnologías como el Big Data, la IA o el uso de sensores. Podemos controlar la intensidad o el tono, dependiendo por ejemplo del momento del día en que nos encontremos y la necesidad lumínica que haya.

Como es de esperar, este tipo de bombillas no sólo pueden instaurarse en las ciudades, también en tu propio domicilio, poseyendo tú mismo en este caso todo el control sobre ellas. Además, una vez hecha la inversión inicial, no sólo se recupera fácilmente sino que se obtienen beneficios posteriores. Las luces LED tienen una mayor duración y un menor consumo energético.

Ventajas del Smart Lighting en una Smart City.

La sostenibilidad tanto energética como económica, son las principales ventajas que se nos vienen a la cabeza al hablar de la implantación de un sistema lumínico inteligente. Sin embargo, existen también otros beneficios enfocados a los ciudadanos y a la administración que no nos dejan insatisfechos.

Capacidad de respuesta.

Entre las capacidades del IoT, se encuentra la de poder advertir de problemas en las calles públicas. Pueden integrarse, por ejemplo, en postes de luz u otros elementos de la vía urbana, y así ayudar a reportar los problemas o incidencias que puedan ocurrir.

Ofrecer información a los usuarios.

Estos mismos dispositivos IoT que se encuentran integrados en la vía pública también pueden ser de utilidad en situaciones de servicio. Pueden aportar información útil a la ciudadanía y a las administraciones públicas sobre la disponibilidad en parkings públicos, las calles que necesitan servicios de limpieza, el nivel de tráfico en determinadas zonas de la ciudad, etc.

Ahorro económico y rápida recuperación de la inversión.

De la misma manera en que se reduce el gasto energético, ocurre con los costes eléctricos, pudiendo estos llegar a disminuir hasta un 65%. Relacionado con el ahorro económico, encontramos también esta ventaja. Tanto comparando con los sistemas lumínicos convencionales, como haciendo un análisis por separado, los sistemas de alumbrado inteligente tienen un impresionante retorno de la inversión.

Las luces LED suponen un gasto energético mucho menor, y tienen mayor duración que las convencionales. Además, mediante estos sistemas inteligentes y digitalizados, se reducen los costes de una gran cantidad de procesos que anteriormente debían realizarse de manera manual.

Gestión eficiente de la energía.

La reducción del gasto energético es una realidad. Según los estudios realizados por diferentes investigadoras de nuevas tecnologías como Gartner, así como las pruebas realizadas y los proyectos ya desarrollados, estos sistemas pueden ahorrar hasta el 80% de la energía que gastaría un alumbrado público convencional.

Y no sólo nos quedamos en el ahorro de energía. Este tipo de sistemas, ayudan también a reducir de manera considerable las emisiones de CO2 (principal gas responsable de la contaminación de nuestra atmósfera).

Cómo implementar un sistema de Smart Lighting en tu ciudad.

Un ejemplo real que se está llevando a cabo y está funcionando actualmente, es el sistema de alumbrado urbano inteligente que se gradúa en función de los peatones. Muchas calles, parques, y espacios públicos en general, se vacían al llegar la noche, mientras las farolas y luces siguen encendidas, suponiendo un gasto innecesario. Sin embargo, no podemos dejar las ciudades completamente a oscuras, ya que debemos responsabilizarnos de que los peatones caminen seguros y sin problemas de viabilidad. En búsqueda de una solución que responda a estos dos problemas, aparece este sistema.

El mecanismo es sencillo, sólo hacen falta sensores que detecten el movimiento ciudadano. Cuando los espacios están vacíos, la iluminación se reduce a un mínimo fijado, reduciendo al mínimo los costes. Cuando se detectan usuarios, las luces se activan permitiéndoles así seguir con su ruta sin altercados. Los cambios de luz se producen de manera gradual, casi imperceptibles para las personas, y con el tiempo suficiente para que puedan realizar su camino tranquilamente, con iluminación tanto delantera como trasera.

Estos sistemas además, tienen otra función nocturna, que es la de avisar a los coches cuando los peatones se disponen a cruzar la calle.

El proceso de digitalización es sencillo, pero para poder aplicar nuestras soluciones IoT en este sector, necesitamos una red troncal o backbone que permita interconectar otras redes y que estas se comuniquen entre ellas.

Este sistema ya está implantado en algunos municipios de ciudades españolas como Madrid o Navarra, donde se han sustituido las luces antiguas por luces LED, permitiendo un ahorro energético del 75%.

Mitigar la contaminación lumínica gracias al Alumbrado Urbano Inteligente.

En España existen diferentes leyes y normativas que afectan a la contaminación lumínica. Cada vez son más las ciudades que se suman al movimiento de astroturismo, creando normativas municipales para adaptarse a la conocida Ley del Cielo o sumándose a la la Declaración de la Palma en defensa del cielo nocturno de 2007.

Ya hemos visto los beneficios del alumbrado inteligente con respecto al ahorro y la eficiencia, pero aún hay más. La contaminación lumínica es uno de los tipos de contaminación más usuales en los núcleos urbanos. El exceso de luces artificiales hacen que nuestros cielos se conviertan en pantallas opacas que no nos permitan observar más allá de las luces de la ciudad. Y esto es un gran problema para la visualización de estrellas, constelaciones, o cualquier tipo de fenómeno nocturno.

Con esta reflexión, nace un nuevo tipo de turismo que puede generar un nuevo perfil de turista: el astroturismo. Un gobierno que apueste por un sistema lumínico inteligente, ya no sólo está apostando por la sostenibilidad, el ahorro y la eficiencia. También se está abriendo nicho en el sector turístico actual, ofreciendo a los usuarios las cualidades perfectas para diferenciarse.

Hemos de tener en cuenta además, que España es uno de los países cuyo PIB se basa en gran medida en el sector turístico, y la cual posee municipios con increíbles vistas al cielo, por lo que esta es una gran oportunidad.

La defensa del cielo nocturno trae consigo diversos beneficios. La modernidad con la que se concibe nuestro municipio, la creación de una iluminación homogénea en toda la ciudad o el ahorro de costes energéticos. Este último se debe a que, gracias al aumento de luz nocturna natural, la ciudad reduce su consumo de luz artificial.

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